Hoy estaba pensando, y los que me conocéis lo sabéis por qué, qué pasaría si me despidieran. Un día me levanto, voy a trabajar como siempre, y alguien me dice que ya no me necesitan y que prescinden de mí, dándome 15 días para recoger. ¿Qué pasaría con mi vida entonces? Sé, más bien presupongo, que me resultaría difícil econtrar algo "de lo mío", soy socióloga, no nos engañemos... y además especializada en análisis de datos (what is that?), así que tendría varias opciones:
- Estudiar oposiciones. Sí, vale, es una de las mejores opciones conforme está la vida, trabajo fijo para toda la vida, facilidades con los bancos, me daría mucho tiempo libre para disfrutar de mis muchas aficiones, no cobraría mal... Pero no podría ascender ni cambiar de actividad laboral, cosa que me frena, ¿no me resultaría aburrido? Que yo muy inquieta. Además, prefería morir atada a la rama de un árbol siendo sumergida múltiples veces en un río que ponerme a estudiar (con el peñazo que tiene que ser cualquier temario de oposición) enclaustrada en casa o en la biblioteca..
- Buscar otro trabajo. Ya sé que he dicho que supongo que me resultaría difícil, pero podría intentarlo y mientras tanto mal-vivir con el paro. Actualizar el currículum, ir al INEM a sellar, ser asidua a infojobs, hacer entrevistas (si es que consigo alguna) con sus respectivas pruebas estúpidas y psicotécnicos para averiguar si estoy de la olla, actuar para conseguir que me tomen en cuenta y quizás aún así no conseguir nada. ¿Y si pasa el tiempo y sigo sin trabajo qué?
- Irme fuera a estudiar inglés. De las tres, esta opción es la que me resutla más atractiva. Pero claro, tengo que pagar la hipoteca de la casa, porque ahora no se vende nada y además si vendiera, tendría que devolver las ayudas, y además está el Milo, ¿si me voy qué hago con él? Aún con todo, me gusta pensar que lo solucionaría y que podría irme por ahí, a ver mundo, a aprender a estar sola, a sobrevivir como pudiera, a echar de menos de mi casa y mis amigos y mi familia... ¡ah! y a aprender inglés.
Pero pensándolo (lo sé, es difícil seguir el hilo de mis enrevesados pensamientos) me he dado cuenta de que hay una época para todo. Sí, si realmente hubiera sido valiente me habría ido en su día, como tenía pensado y decidido, y ahora no estaría preguntándome qué habría pasado si...
Es difilísimo saber cuál es la decisión correcta en determinadas situaciones, es más, no tengo muy claro que haya una "decisión correcta", sólo son decisiones, caminos que escoges andar, metas a las que te quieres digirir, elecciones al fin y al cabo. Tus elecciones.
Pero cuando eliges algo también pierdes algo, pierdes aquello que no eliges. Es tonto, pero es así. Yo elegí aceptar ese trabajo, en vez de irme a Italia con una Erasmus que me habían concedido. Por lo tanto, perdí la oportunidad de aprender italiano, de sobrevivir sola y de cambiar de aires, que buena falta me hacía.
Como Peyton Sawyer dice en uno de sus podcasts (ya os presentaré otro día a este personaje de ficción que se ha colado en mi corazón)...
Yo también quiero conducir por todos esos caminos que me ofrece la vida con la música a toda leche y el sol en lo alto, yo quiero poder hacer todo lo que se me ponga por delante, de una forma o de otra... Quiero dejar de preguntarme qué habría pasado si hubiera rechazado mi trabajo y aceptado la beca, si le hubiera dicho que sí a ese amigo que empezó a sentir algo más por mí en un momento de mi vida, si hubiera aprendido a tocar la guitarra cuando mi madre me la regaló o si no me hubiera tomado la pastilla del día después aquella vez que tuve un "accidente". ¿Cómo sería mi vida ahora?
Y bueno, después de tanto pensar he tomado una decisión: elijo no pensar en ello, elijo disfrutar de mi vida tal y como está, suponiendo que averiguaré cómo cruzar ciertos puentes cuando me encuentre frente a ellos, y elijo despertarme todos los días escuchando esta canción... ¡Viva la vida!
Es difilísimo saber cuál es la decisión correcta en determinadas situaciones, es más, no tengo muy claro que haya una "decisión correcta", sólo son decisiones, caminos que escoges andar, metas a las que te quieres digirir, elecciones al fin y al cabo. Tus elecciones.
Pero cuando eliges algo también pierdes algo, pierdes aquello que no eliges. Es tonto, pero es así. Yo elegí aceptar ese trabajo, en vez de irme a Italia con una Erasmus que me habían concedido. Por lo tanto, perdí la oportunidad de aprender italiano, de sobrevivir sola y de cambiar de aires, que buena falta me hacía.
Como Peyton Sawyer dice en uno de sus podcasts (ya os presentaré otro día a este personaje de ficción que se ha colado en mi corazón)...
Choices! And when I have to make a decision, what I always think about is that with every choice so many other roads are left untraveled and I want to drive those roads in my car with the stereo on loud and the sun on my back because ultimately I think it's true what they say, ya know? that life is just a long journey that's made of a million little road trips. Or do they say that? um, if not, then I'll say it. We should be in that car with our friends just driving all those roads... carefully, but still ya know?
Yo también quiero conducir por todos esos caminos que me ofrece la vida con la música a toda leche y el sol en lo alto, yo quiero poder hacer todo lo que se me ponga por delante, de una forma o de otra... Quiero dejar de preguntarme qué habría pasado si hubiera rechazado mi trabajo y aceptado la beca, si le hubiera dicho que sí a ese amigo que empezó a sentir algo más por mí en un momento de mi vida, si hubiera aprendido a tocar la guitarra cuando mi madre me la regaló o si no me hubiera tomado la pastilla del día después aquella vez que tuve un "accidente". ¿Cómo sería mi vida ahora?
Y bueno, después de tanto pensar he tomado una decisión: elijo no pensar en ello, elijo disfrutar de mi vida tal y como está, suponiendo que averiguaré cómo cruzar ciertos puentes cuando me encuentre frente a ellos, y elijo despertarme todos los días escuchando esta canción... ¡Viva la vida!
http://titania1000.blogspot.com/2008/10/cuando-eliges-pierdes.html?showComment=1222977000000#c5724792387935292330'> 2 de octubre de 2008, 20:50
Hola!!
Estoy bastante de acuerdo contigo! Las elecciones q haces nunca son buenas o malas, son correctas en cuanto al cumulo de circunstancias que te rodean. A posteri es facil decir, si algo ha sido bueno o malo, eso es una mierda, cada uno hace lo correcto en cada momento y si no te gusta luego lo cambias...
me ha gustado esta entrada, q lo sepas...
Vivan las decisiones!!! Viva pq te hacen arriegarte y si no te arriesgas no vives!! asi q VIVA!!!
bssssssssss
http://titania1000.blogspot.com/2008/10/cuando-eliges-pierdes.html?showComment=1223028240000#c6480578076371389059'> 3 de octubre de 2008, 11:04
Pues si, la vida es así, un cumulo de decisiones de las que depende nuestro futuro, pero siempre hay que intentar arriesgar por lo que uno quiere de verdad.
Me encanta la canción de Coldplay, además es una de las que han usado mas para empezar todas las temporadas, como el año pasado fue la de Young Folks.
Un beso guapa.
http://titania1000.blogspot.com/2008/10/cuando-eliges-pierdes.html?showComment=1223655000000#c8368033463667066937'> 10 de octubre de 2008, 17:10
¿Qué sería la vida sin riesgos y sin decisiones importantes? Pues un montón de días suceciendose profundamente aburridos y sin ningún aliciente. Arriesga y gana, (o pierde), pero si no arriesgas vives a medias.
Por cierto, yo elijo la puerta 3 :PP
http://titania1000.blogspot.com/2008/10/cuando-eliges-pierdes.html?showComment=1223836440000#c5638372356652177732'> 12 de octubre de 2008, 19:34
¡Cuánto dilema vital! ¡Qué complicado resulta para un domingo, jeje!
Eso sí, la canción de Coldplay no tiene desperdicio.
Saludos